Por Blanca Ruiz Antón
Fotografía: Jorge Zorrilla
Artículo publicado en la edición número 38 de la revista Misión, la revista de suscripción gratuita más leída por las familias católicas de España.
Secretario General de Escuelas Católicas
“Luchar por la escuela concertada nos compete a todos y a cada uno. Las organizaciones han de hacerlo, sin duda, pero también los padres, que son a quienes más afecta esa libertad de enseñanza para sus hijos. Ellos deben ser los principales preocupados porque esta libertad se respete”. Así de claro y contundente explica José María Alvira, secretario general de Escuelas Católicas, la importancia de mantenerse firmes ante los conciertos y el pacto educativo.
A pesar de que el lema “Sabemos educar. Libertad y compromiso” del XIII Congreso de Escuelas Católicas se ideó hace más de un año, hoy es más actual que nunca, tras las recientes declaraciones de grupos políticos que expresan su voluntad de retirar la asignatura de Religión de las escuelas o el concierto a los colegios católicos. Estas propuestas, según Alvira, “no son realistas ni responden al conjunto de la sociedad española. Quienes proponen esto no pueden olvidar que hay un porcentaje muy elevado de padres que eligen para sus hijos la asignatura de Religión, y eso es un dato que no puede pasar por alto ningún partido”. Por otro lado, no hay que olvidar que los conciertos en España ahorran al Estado español 2.850 millones de euros anuales y que hay 2.590 centros concertados de los que se benefician 1.434.524 alumnos y 123.835 profesores, sin contar el resto de personal.
Pluralidad de escuelas
Juan Carlos Pérez Godoy, presidente de Escuelas Católicas, manifestaba durante las conclusiones del congreso la importancia de que la educación deje de utilizarse como coartada para pretensiones monopolizadoras. “No basta con que haya pluralidad dentro de una escuela única, se necesita pluralidad de escuelas. Por eso defendemos la libertad de enseñanza y luchamos por ella. El ideario es lo que justifica la existencia de nuestros centros y su concierto”, subrayó. Además, la libertad de enseñanza es un principio reconocido en la Constitución española, que es la que permite mantener este tipo de escuelas, dotadas de un proyecto educativo propio. “Se trata de colegios que saben educar y están comprometidos con la educación de muchas generaciones”, añadió.
Un pacto educativo
Después de tres días repletos de ponencias e intervenciones de expertos y más de 1.800 participantes, las conclusiones se centraron en reforzar la importancia de llegar a un pacto educativo que aborde la mejora de la calidad del sistema y garantice los derechos y las libertades educativas de toda la sociedad española. El beneficio de los centros concertados y católicos es, según el secretario general de Escuelas Católicas, “para toda la ciudad, no solo para quienes los escogen”, por lo que, para alcanzar el pacto educativo, “estamos dispuestos a dialogar con todo el mundo, pero sin renunciar a nuestros principios”. Alvira explica que “los conciertos son lo que nos permiten que la libertad de educación sea efectiva y real, que los padres puedan elegir sin condicionamientos económicos”.
Escuela concertada no es solo escuela católica
Este pacto educativo debe basarse en la libertad de enseñanza, que, según José María Alvira, nunca debe excluir otras opciones educativas. “Queremos que, además de los colegios públicos, haya también escuelas con un ideario (religioso o no) mantenidas por el Estado para que los padres puedan elegir sin restricciones económicas y para que así la enseñanza sea gratuita tanto para unos como para otros; esa es la verdadera libertad. La escuela pública no puede ser la única porque no es lo propio en un país democrático”, afirma Alvira a Misión.
“La escuela concertada católica beneficia a toda la ciudad, no solo a quien la escoge”
El secretario general también señaló que “a veces equivocadamente o con mala voluntad, se identifican las escuelas concertadas con las católicas y el concierto educativo, con privilegios para la Iglesia. Sin embargo, no se le conceden privilegios ni estamos hablando de acuerdos entre la Santa Sede y el Estado español. Los conciertos educativos de los colegios forman parte de los derechos civiles, y grupos de cualquier confesión religiosa o laicos, pueden tener acceso a ellos”.
Durante el congreso, se abordó la libertad de enseñanza desde una visión jurídica, económica y legal. En algunas ponencias también se revisó el modelo educativo de Francia, que en opinión de Alvira, “hace de la laicidad un valor” , pero “la educación concertada está aún más asentada que en España, donde gran parte de los centros concertados son católicos, pero otra parte no lo son. La sociedad francesa reconoce como un bien el hecho de que haya diferentes opciones para los padres”.
El banco de la escuela católica
El Banco Popular fue el principal patrocinador del Congreso de Escuelas Católicas. La entidad lleva 90 años comprometido con la enseñanza religiosa y cuenta con una serie de ofertas y productos ventajosos para los afiliados de centros católicos de FERE-CECA, así como para sus trabajadores.
Artículo publicado en la edición número 38 de la revista Misión, la revista de suscripción gratuita más leída por las familias católicas de España.
